Sabes
el sol puede marcar mis ojos, quemarlas
con toda furia .Pero aun así no se asemejaran a los tuyos.
El
sol intento quemarte, más como vio que así del color del trigo se veía mejor,
te dejo doradita, haciendo de la belleza
una guarida en ti.
Todos
los días llaman tu nombre, es tu cabello
quien responde primero en forma de rayos al infinito que hacen una catarata sublime.
Sé
que no tienes los labios tan grandes pero sé que son los suficientes para
dibujar un pétalo de rosa donde el color proviene de tus labios .
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